Juguetes
Los juguetes desempeñan un papel fundamental en el proceso de crecimiento de los niños, ya que el juego es un componente clave del desarrollo, la salud y el bienestar. Es una actividad esencial en la infancia y contribuye significativamente al desarrollo cognitivo, social y emocional del niño. Por lo tanto, la producción, importación y comercialización de juguetes falsificados o peligrosos tiene un impacto negativo inmediato en los delicados usuarios finales a los que están destinados: los niños. Por ello, vale la pena elegir y comprar productos fabricados por empresas que operan de acuerdo con la ley, para entregar siempre un objeto seguro en manos de nuestros hijos.
Los datos más alarmantes se refieren a la peligrosidad de los juguetes incautados. Se trata principalmente de juguetes pintados con productos químicos altamente cancerígenos o que contienen metales pesados, montados con piezas fácilmente desmontables con riesgo de ingestión o asfixia, con puntas o esquinas afiladas, o con largos cordones que suponen un peligro real de estrangulamiento.
Para combatir este tipo de tráfico ilegal de forma unificada y coordinada, es importante establecer asociaciones con empresas y asociaciones comerciales, que colaboran con las instituciones contra la propagación del "mercado de la falsificación". Las empresas que operan legalmente son las únicas que conocen los "secretos" y las características de producción de sus mercancías y de sus respectivos mercados, por lo que pueden proporcionar información esencial para proteger la autenticidad de sus productos.
Para proteger a la categoría más vulnerable de niños de los peligros relacionados con la construcción y la composición de los juguetes, la legislación europea e italiana dicta las normas de conformidad y los requisitos de seguridad que deben respetarse para evitar los riesgos químicos, microbiológicos y de asfixia o estrangulamiento. El cumplimiento de las directivas y normas impuestas por la Comunidad Europea se resume en la colocación correcta del marcado "CE".
El juego es un componente fundamental del desarrollo del comportamiento, que actúa directamente sobre la evolución afectiva y cognitiva del niño, ya que sienta las bases de una vida adulta serena.